viernes, 29 de enero de 2010


Dormías, y yo estaba recostada sobre tu pecho. Tu mano rodeaba mi espalda y mi cabello rozaba tu mejilla. Me hubiese quedado así para siempre. Sentía tu respiración, tus latidos, el calor de tu cuerpo. Irradiabas luz y me traías calma. Cada instante a tu lado, me llevaba a pensar que eras todo lo que quería, y todo lo que necesitaba. Me hacías sentir el amor que había buscado sentir durante tanto tiempo, y te tenía ahí para mí, por mí. No había dudas, me hacías la mujer más feliz y más completa. Abriste los ojos y me miraste. No me esforcé por disimular la admiración que tenia por tu belleza, ni el tiempo que llevaba viéndote. Mi mirada decía todo. Sonreíste dulcemente, tomaste mi mano, Te acaricie suavemente, i finalmente me quede dormida, en tu pecho, entre tus caricias. Ahí, justamente donde quería estar iDONDE QIERO VOLVEER A ESTAR!